El pasado 11 de noviembre, se aprobó por la Cámara de Diputados la Ley de Transformación Digital, la cual sustituye a la ley N° 19.880 y establece a las instituciones y cualquier otro ente que pertenezca al Estado la utilización de canales digitales para tramitación de documentos, tanto internos como de cara al público. 

 

Esta ley fue propuesta con la finalidad de ahorrar costos para a las instituciones y además busca contribuir con el cuidado del medio ambiente. En la actualidad, las instituciones gastan más de 100 millones de dólares en papelería, archivadores, fotocopiado, impresión entre otros.

 

Algunas instituciones sabían que tarde o temprano, esta ley iba a volverse una realidad, por lo tanto, empezaron a incursionar en soluciones digitales que adelantara todo este cambio de paradigma en lo que a gestión de documentos se refiere en Chile. 

 

Un claro ejemplo de esto, es la digitalización de trámites en el Departamento de Extranjería. Antes, para gestionar cualquier requerimiento había que recopilar una serie de documentos y luego consignarlos en las sedes de la institución, lo que generaba largas filas, tiempos muy desfasados y riesgos con el extravío de la información, a diferencia de hoy, todo el trámite se ha vuelto digital, siendo un gran avance para los ciudadanos que realizan este tipo de trámites. 

 

¿Qué contempla la nueva ley?

 

1. El Estado busca la eliminación de todos los trámites en papel y que este proceso sea totalmente digital, tanto para los usuarios como para los funcionarios. 

 

1. Establece una forma más eficiente para registrar información del Estado, donde se detalla el ciclo de vida de un documento y se contempla el desarrollo de un archivo electrónico del Archivo Nacional.

 

1. Los archivos digitales comienzan a tener validez legal, mediante los cambios a la ley N.º 18.845 sobre microcopia o micrograbación, se reconoce la validez de los documentos digitalizados que originalmente hayan sido emitidos en soporte de papel.

 

1. El registro civil se ve altamente beneficiado con los parámetros de esta nueva ley. Al iniciar la transformación digital de los entes gubernamentales, las leyes existentes cambian a un modelo electrónico, siendo la Ley de Tránsito beneficiaria, pudiendo digitalizar el trámite de la primera inscripción de vehículos nuevos o usados y otros procesos por medios electrónicos.

 

1. En la ley, se establece los tiempos de aplicación para que todas las instituciones puedan cumplir con lo establecido. Se plantea un tiempo de 5 años para que cada ente del gobierno adopte el modelo digital, lo que obliga a todas las instituciones a poner en práctica nuevos prácticas para gestionar documentos. 

 

Los resultados visibles para todo este cambio de paradigma no solo radica en lo económico, sino también, busca beneficiar a los chilenos en la forma de realizar trámites y no perder tiempo ni dinero en el proceso. 

 

Jesús Fuentes – Apiux Tecnología